Verba Odrec, una finca de piñas en La Chorrera

En el corregimiento de Hurtado en La Chorrera en Panamá se encuentra Verba Odrec, una finca de piñas. Cuando un capitalino piensa en esta zona del país, hoy en día piensa en residencias, no en producción agrícola, ni en actividades turísticas. Pero la realidad es que las actividades compiten a pesar las viviendas son mejor negocio, la tierras son fértiles y brindan varias fincas aptas para hacer agro turismo a menos de una hora de la ciudad de Panamá.

La Chorrera es famosa por sus piñas

A pesar de los retos por el alto precio de las tierras y la mano de obra, sumado con el reto de los cambios climáticos, la piña sigue siendo una de las frutas que más se exporta desde Panamá. La piña y el banano compiten siempre primer y segundo lugar ya que pueden ser producidas todo el año. Otras frutas tropicales como la sandia y el melón sólo tienen temporadas de cosecha de cuatro meses.

Las tierras de La Chorrera son sumamente fértil para tener una finca de piñas. Unas 1,666 hectáreas son distribuidas entre los corregimientos de Herrera, Mendoza, La Represa, Hurtado, Amador y El Arado. Actualmente, un 80% de las piñas producidas se exportan. 20% se quedan en el mercado local que ahora compite con piñas importadas desde Costa Rica, luego del Tratado de Libre Comercio.

La variedad que se siembra es M2 Golden que justamente trajeron de Costa Rica a sugerencia de los dueños de Verba Odrec. Esta semilla produce piñas con un grado promedio de 14 Brix (indice de dulzura) que es cotizado en mercados internacionales. Lograr estas piñas dulces ha permitido que Panamá se vuelva un exportador. Van a destinos exóticos como Holanda, España, Alemania, Estados Unidos, Turquía, Dubai y Corea del Sur.

Finca de piñas pionera

Entre los 135 productores de piña en La Chorrera, se destaca la finca Verba Odrec, que admito que me costó memorizarme el nombre. Llegamos en menos de 1 hora desde la Ciudad de Panamá (60 kilómetros) usando Waze. La carretera está muy buena, así que no se necesita un carro 4×4. Nos acompañaron nuestros amigos de Finca TV que también querían hacer un reportaje.

La familia Barrios Vergara tenia la finca de 160 hectáreas desde el principio de la década de 1970. Inicialmente criaban puercos y pollos, pero al final de los 1990s decidieron cambiar a una finca de piñas. Edna Barrios de Vergara organizó a los productores de la zona en la Asociación de Exportadores de Piña de Panamá (AANPEP). Su planta es muy moderna. Más de 50 productores empacan sus piñas para ser aptas para la exportación.

Tienen 133 hectáreas en cultivo tradicional pero de forma moderna con sistema de goteo. Me encantó que esta designando una zona para hacer un cultivo orgánico que tiene más de cinco años de descanso. Así podrán competir en un mercado que esta creciendo muchísimo.

La mayoría de la producción la exportan. Al igual pasan carros por esta finca de piñas para vender en el mercado de abasto y otros sitios. Sus compradores internacionales les pidieron que hicieran productos con valor agregado como jaleas y deshidratados que están haciendo de forma artesanal hasta que consigan la certificación del Ministerio de Salud. Los que visiten en el futuro van a poder aprender estas técnicas.

Agro turismo de piñas

Para visitas se debe reservar con anticipación y deben ser grupos de ocho personas o más. Si son menos personas se agregan a los tours ya programados. Los miércoles siempre tienen recorridos y están viendo si ponen un día de fin de semana para el mercado local.

Se empieza en la planta empacadora, donde se ve todo el proceso desde el lavado de la piña, selección, empaque, estiva y la ubicación en el cuarto frío. El proceso de estiva involucra colocar una caja sobre la otra en grupos de cinco cajas por línea. Si se usa transporte aéreo son 45 y si es marítimo son 80 en pallets.

Luego paseas por la finca en un grillo con carreta que tiene el logo de “La Doña” que es la marca que usan para exportar. La doña se refiere cariñosamente a la dueña, Edna. Vas a ver las distintas actividades, incluyendo la siembra, preparación, la deshija de semillas y cosecha. Hacia muchísimo calor, así que se recomienda llevar crema de sol, lentes y gorra. Lo bueno es que mientras que pasas por la plantación puedes recoger piñas. Puedes pedir que te las corten con un machete para refrescarte. Las chiquitas amarillas son las más dulces.

Un manantial con unos ojos de agua que se está adecuando para las visitas. Luego vas a pasar por el sector de los árboles frutales que incluye maracuyá, carambolas, pitayas, guanábana, limones, guayabas, papayas, yuca, y otros cultivos. La idea es que los turistas puedan apreciar las frutas y tubérculos tropicales. Habían muchísimas frutas, así que nos regalaron para llevarnos a casa.

Al final terminas en una gran casa techada abierta para hacer una degustación de frutas y jugos que está incluida dentro del paquete. Es posible incluir almuerzo en la visita por día, pero hay que avisar.

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